martes, 11 de febrero de 2014

Escritura Sagraga
http://rsanzcarrera2.wordpress.com/2007/05/28/concilio-de-trento-sesion-iv-8-de-abril-de-1546/

Divisiones y partes de la Biblia.

 

  Las dos grandes divisiones o partes de la Biblia son Antiguo y Nuevo Testamento; esta división procede de los más antiguos tiempos cristianos.
En total, la Biblia se compone de 73 libros, de los cuales 46 constituyen el Antiguo Testamento y 27 el Nuevo Testamento.
El Antiguo Testamento fue dividido por los hebreos en tres partes:
  • 1) Thóráh (=Ley) o Pentateuco porque comprendía los 5 primeros libros
  • 2) Nebi’im (=Profetas), divididos en Nebi’im hare’sonim (=profetas anteriores), que son desde Josué al 4° (=2º) de Reyes, y Nebi’im ha’ajarónim (=profetas posteriores), que comprenden desde Isaías hasta Malaquías.
  • 3) Kethúbim (=Hagiógrafos), o Escritos, que son el resto de los escritos sagrados (Ps, Prv, Iob, Cant, Ruth, Lam, Eccl, Est, Dan, Esd, Neh, 1 y 2 Chro o Par).
Hoy día en la Iglesia la división más corriente es la llamada lógica, porque hace relación especialmente con el contenido de los libros; consta de tres grandes divisiones, que se aplican paralelamente a uno y otro Testamento: históricos, sapienciales (o didácticos) y proféticos.
Antiguo Testamento (46 libros):
  • (Históricos): Pentateuco (5: Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio) y Libros Históricos (16: Josué, Jueces, Rut, 1-2 Samuel, 1-2 Reyes, 1-2 Crónicas, Esdras, Hehemias, Tobias, Judit, Ester, 1-2 Macabeos)
  • (Didácticos): Libros Poéticos y Sapienciales (7: Job, Salmos, Proverbios, Qohelet, Cantar, Sabiduría y Eclesiastico).
  • (Proféticos): Libros Proféticos (18: Isaías, Jeremías, Lamentaciones, Baruc, Ezequiel y Daniel; Oseas, Joel, Amós, Abdías, Jonás, Miqueas, Nahúm, Habacuc, Sofonías, Ageo, Zacarías y Malaquías)
Nuevo Testamento (27 libros)
  • (Históricos): Evangelios (4: Mateo, Marcos, Lucas y Juan) y Hechos de los Apóstoles (1)
  • (Didácticos): Cartas de san Pablo (13: Romanos, 1-2 Corintios, Galatas, Efesios, Filipenses, Colosenses, 1-2 Tesalonicenses, 1-2 Timoteo, Tito, Filemón) y Carta a los Hebreos (1); Cartas Apostólicas (7: Santiago, 1-2 Pedro, 1-3 Juan y Judas)
  • (Proféticos): Apocalipsis (1)

martes, 4 de febrero de 2014

Historia de la Biblia Septuaginta

La Biblia griega, comúnmente llamada Biblia Septuaginta o Biblia de los Setenta (Μετάφραση των Εβδομήκοντα), y generalmente abreviada simplemente LXX, fue traducida de textos hebreos y arameos más antiguos que las posteriores series de ediciones que siglos más tarde fueron asentadas en la forma actual del texto hebreo-arameo del Tanaj o Biblia hebrea. Representa una síntesis en que se subraya el monoteísmo judío e israelita, así como el carácter universalista de su ética.[1]
La Biblia Septuaginta fue el texto utilizado por las comunidades judías de todo el mundo antiguo más allá de Judea, y luego por la iglesia cristiana primitiva, de habla y cultura griega.[2] Junto con la Biblia hebrea, constituye la base y la fuente del Antiguo Testamento de la gran mayoría de las Biblias cristianas. De hecho, la partición, la clasificación, el orden y los nombres de los libros del Viejo Testamento de las Biblias cristianas (cristianas ortodoxas en Oriente, católicas y protestantes en Occidente) no viene del Tanaj o Biblia hebrea, sino que proviene de los códices judíos y cristianos de la Septuaginta.

Historia de la Biblia Vulgata


La Vulgata es la versión de la Biblia en latín compuesta por San Jerónimo a comienzos del siglo V para cumplir el encargo que le hiciera el papa Dámaso I en 382. La intención era reemplazar a la Vetus latina, que resultaba inadecuada por haber sido traducida sin un criterio unificado y con calidad muy desigual. Al ser la versión sancionada oficialmente por la Iglesia católica, la Vulgata tuvo una gran difusión a lo largo de la Edad Media; el enorme número de ejemplares que se copiaron tuvo como consecuencia la deturpación del texto original debido a errores de copia, a la inclusión de lecturas de la Vetus latina y la inserción de glosas marginales dentro del texto. Al parecer de los expertos, los códices de la Vulgata que circularon en la Castilla medieval son del tipo sorbónico y más en concreto pertenecientes a la familia Omega. De las biblias medievales en castellano son traducción de originales en latín los códices que forman la Biblia prealfonsí (E6 y E8), las partes bíblicas de la General estoria y el libro de Job de López de Ayala. Además, en los demás códices también son traducción de la Vulgata las partes deuterocanónicas (Tobit, Judit, Macabeos 1-2, Sabiduría, Eclesiástico y Baruc). En la Biblia de Alba, los Salmos están traducidos del Salterio Galicano; el resto del códice es traducción del hebreo si bien con numerosas lecturas tomadas de la Vulgata. También son traducción de la Vulgata los Salmos del códice E4. En el corpus Biblia medieval incluimos una versión de la Vulgata para facilitar la consulta con el texto latino. Debido a la gran cantidad y heterogeneidad de los códices bíblicos en latín que circularon en la Edad Media, el estudio detallado del modelo subyacente de las traducciones castellanas requiere emplear una edición de la Vulgata con aparato crítico así como tener en cuenta la Vetus latina.